El uso del esmalte en gel o gelish ofrece una alternativa duradera y por consiguiente más práctica para lucir una manicura y/o pedicura perfecta hasta por 3 semanas, pero ¿qué tanto afecta nos afecta?

Si aplica este gel en sus uñas, tome en cuenta estos consejos para no anteponer la vanidad a la la salud.

  • Realice las manicuras con gel ocasionalmente para permitir que las uñas crezcan y tengan tiempo de reponerse y sanar de la agresión de los químicos y sobre todo de la acetona pura con la cual se retira.
  • Minutos antes de realizarse la aplicación del gel proteja sus manos aplicando un protector solar de amplio espectro para disminuir el riesgo de los daños causados por la exposición a la luz UV durante el secado del esmalte en gel.
  • Exija a la persona que realice la manicura que no toque, recorra y mucho menos retire la cutícula, ya que esto puede incrementar el riesgo de infecciones e inflamación. Además esas acciones contribuyen a que las uñas se debiliten o se sequen.
  • Cuando vaya a retirar el gel no sumerja los dedos o manos en el químico (acetona pura) sólo las uñas, lo estrictamente necesario.
  • Hidrate sus uñas varias veces durante el día con una crema humectante para evitar que se sequen y se quiebren.

A raíz de la utilización del esmalte se pueden presentar distintos problemas en las uñas y se incrementa el riesgo de desarrollar cáncer en la piel en medida de la frecuencia con la que se realiza la aplicación debido a la exposición de la luz UV necesaria para el proceso de secado.

Si nota cambios en sus uñas, algo fuera de lo común o alguna molestia en ellas o en la piel de alrededor consulte a un dermatólogo, recuerde que la luz UV es un factor desencadenante del melanoma, un tipo de cáncer de piel de difícil tratamiento.

Como siempre la recomendación médica consiste en practicar con la menor frecuencia posible los procedimientos que provocan alguna afectación, realizarlos de forma esporádica no representan mayor impacto.